Los estudios con niños han demostrado la importancia de la etapa de desarrollo de la dentición, ya que la postura de la cabeza puede verse afectada por la oclusión dental. En la fase de dentición mixta, los cambios durante el desarrollo de la oclusión pueden dar lugar a cambios en la postura de la cabeza. La aparición de hábitos orales dañinos durante el desarrollo craneofacial puede tener un impacto negativo en la función y el crecimiento equilibrado en la infancia. Las alteraciones de este tipo afectan la posición de la cabeza y la mandíbula, con el consiguiente efecto en la postura del cuerpo. Los hábitos parafuncionales, como el bruxismo, el morderse las uñas y la succión no nutritiva, son comunes entre los niños y se han asociado con trastornos funcionales del sistema masticatorio durante el desarrollo craneofacial, que pueden tener un efecto profundo en las estructuras orofaciales, alterando la postura de La cabeza, la mandíbula y el cuerpo. Cualquier fuerza ejercida sobre las mandíbulas debe identificarse como un factor desencadenante de un desequilibrio funcional en el sistema masticatorio. El bruxismo, en particular, causa daño al sistema estomatognático, con profundos efectos en las estructuras orofaciales. Además, el bruxismo se correlaciona con alteraciones cráneo-cervicales. Otros hábitos orales perjudiciales, como el uso continuo de goma de mascar, morderse las uñas y morder lápices o bolígrafos, son comunes entre los niños y adolescentes de todo el mundo y han demostrado efectos perjudiciales en el sistema estomatognático cuando se realizan diariamente. Lee más…